"12 heißt: Ich liebe dich" (12 significa: Te amo) es una película hecha para la televisión acerca de las consecuencias de haber vivido en la RDA. En este capítulo Bettina Kramer busca por teléfono a un tal señor Kohlfeld de su pasado, lo que pone de manifiesto que ella es una mujer con un pasado difícil.

Dresden, 1985. Bettina y su marido han dado una fiesta en casa y cuando suena el timbre piensan que algún vecino quiere quejarse. Pero es la policía del estado, la cual les detiene en medio de la noche.

Bettina se encuentra en la prisión preventiva separada de su marido y es interrogada por un joven interrogador acerca de su contacto con Berlín Occidental.

Jan, ahora contable, recibe una carta de Bettina Kremer sobre los ocho meses que pasó en prisión en 1985.

Bettina se encuentra en mal estado debido a no haber dormido y comido apenas y a las interrogaciones constantes. Sin embargo, su interrogador también parece mostrar un lado humano.

Aunque Bettina todavía no ha recibido respuesta de su antiguo interrogador, su jefa en el trabajo la anima a perseverar.

El jefe de Jan le obliga a repetir el interrogatorio porque las declaraciones de Bettina le resultan insuficientes cuando lee el protocolo. ¿Qué escribirá Jan en el próximo interrogatorio?

El interrogador trata de desconcertar a Bettina empezando a contar cosas de su marido.

Bettina tiene un interrogatorio desagradable con el superior de Jan. Jan le informa que estará durante unas semanas de vacaciones.

La esposa de Jan no quiere que su marido se encuentre con Bettina años más tarde.

El procedimiento de investigación contra Bettina casi ha terminado. Jan la sorprende con preguntas inusuales...

En la última reunión durante la investigación, Jan y Bettina revelan los sentimientos que tienen el uno para el otro. En el presente se vuelven a ver por primera vez después de muchos años.

Después de muchos años, Bettina y Jan se encuentran de nuevo y hablan sobre el pasado. Ambos todavía están enamorados. A continuación, Bettina habla con su pareja actual...

Jan no puede soportar contarles a su esposa e hija la verdad sobre sus sentimientos hacia Bettina, a pesar de que continúa viéndola.

Finalmente, Jan confiesa a su esposa que se enamoró de Bettina en aquella época.